Jacobo, bailarín profesional, piensa: “Estoy embelesado haciendo lo que me gusta, tanto que puedo decir que estoy en estado de Flow, fluyendo de manera maravillosa… Pero eso que tanto me gusta, de pronto tiene una pausa y me enfrento a esos otros aspectos de la vida: a esos que me son indiferentes o a aquellos que definitivamente no van conmigo… Y me pregunto entonces: ¿Podría sentir tanto aprecio por las cosas que no me gustan?
Para tener un estado de flujo unificado a cada aspecto de la vida y no a una sola actividad (como en el caso de Jacobo que solo fluye con el baile), de tal manera que se pueda vivir una experiencia óptima y profunda, es necesario hacer que todas las partes de la vida encajen y se articulen. Esto hará que se logre la trascendencia del significado de la vida.
Pero, ¿cuál es el significado de la vida? El significado[1] de la vida es el qué tú les des. Eso, sencillamente, termina por ser extraordinario porque depende de cada quién darle un valor trascendente. Csikszentmihalyi decía: “El significado de la vida es significado: sea lo que sea, venga de donde venga, tener un propósito unificado es lo que le da sentido a la vida”.
Para elaborar el significado de la vida y lograr el flujo unificado[2] y disfrutar la existencia, se requiere vincular todas las actividades entre sí, de manera significativa y no disfrutar de una sola, de forma puntual porque, por ejemplo, si se disfruta de la profesión o de la familia solamente, estaremos siendo vulnerables a los caprichos del caos: nada es para siempre. La profesión acabará, los familiares partirán. Por tanto, es necesario dar un salto, un último paso en el control de la consciencia, de tal manera que toda la vida se convierta en una experiencia unificada de flujo. El presente mirará el pasado en perspectiva, con gratitud, mientras la mirada al futuro estará llena de esperanza. (Rojas Acuña, 2022)
¿Cuál es tu propósito en la vida? ¿Qué tan parecido(a) eres a tu propósito? Cuando tu propósito y tú sean lo mismo, habrás logrado conseguir el flujo unificado.
Todo comenzará con cultivar el propósito[3], desarrollando las habilidades para alcanzar una meta desafiante, un fin, pensando en positivo, haciendo que los sentimientos y las acciones se encuentren en armonía. Aquí no se vale pensar y sentir solamente: hay que actuar porque, en palabras de Blake: “Quien desea, pero no actúa, cría pestilencia”. Cultivar el propósito hace que las personas puedan desarrollar el concepto de quiénes son, de lo que quieren lograr en la vida. (Csikszentmihalyi, 1997)
Tras hacer lo anterior, se pasa al forjamiento de la resolución[4], a la liberación de las intenciones, dando a conocer el propósito, realizando el seguimiento a las metas, estableciendo si los esfuerzos realizados se han empleado de manera correcta. A veces se utiliza el ensayo-error, a veces la consciencia del conocimiento de uno mismo, una vida de acción y también contemplativa y reflexiva. Las intenciones personales (means) deben ser propósitos de acción, metas predecibles y ordenadas.
Adicionalmente se llega a la incorporación de la armonía[5] interior a la consciencia, dándole identidad a las palabras de que se utilizan con relación a los sucesos, logrando el orden para los contenidos de la mente a través de la coherencia entre los pensamientos, los sentimientos y las acciones.
Cuando se habla de comprender el propósito y darle significado a la vida, es posible que sean relevantes en la vida, como temas vitales de descubrimiento[6], algún daño personal que se haya sufrido, un desafío que se generaliza, un modelo heredado de generaciones anteriores, la admiración por otras personas o muchas otras. En cualquier caso, la gratitud debe estar siempre presente, como lo enseña la magia del amor:
"Hoy me propongo: Agradecer. Hoy, comprendo que todo cuanto sucede en mi vida, tiene un profundo propósito de amor, para que yo pueda reconocer la ley y aprender a liberarme definitivamente de toda limitación, de toda dependencia y de todo sufrimiento. Doy gracias a la vida por todo lo que tengo y por todas las circunstancias satisfactorias que me ha dado y también agradezco todas las situaciones difíciles y dolorosas que he pasado, porque me permitieron encontrar mi propio valor." (Estar Bien, 2022)
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GLOSARIO
[1] Una experiencia es significativa cuando se relaciona de forma positiva con las metas de una persona. La vida tiene significado cuando tenemos un propósito que justifica nuestros anhelos, y cuando la experiencia está ordenada. Csikszentmihalyi, M. (1996). Fluir. Una psicología de la felicidad. España: Kairós, p. 362 [2] Experiencia unificada de flujo: Es el conjunto de experiencias enfocadas, concentradas e internamente coherentes que, gracias a su orden interno, tienen un significado en todos los aspectos de la vida.Csikszentmihalyi, M. (1996). Fluir. Una psicología de la felicidad. España: Kairós, p. 333. [3] Propósito: Es el proceso por el cual las personas encuentran que sus vidas tienen un sentido porque tienen una meta que los desafía lo suficiente como para implicar todas sus energías, una meta que puede dar trascendencia a sus vidas. [4] Resolución: Es algo que se decide. [5] Armonía: Son todos los procesos que tienen lugar en la consciencia, como: los pensamientos, las emociones, la voluntad y la memoria. Csikszentmihalyi, M. (1996). Fluir. Una psicología de la felicidad. España: Kairós, p. 368. [6] Tema vital: Es un conjunto de metas vinculado a una meta definitiva que da importancia a todo lo que hace esta persona. Csikszentmihalyi, M. (1996). Fluir. Una psicología de la felicidad. España: Kairós, p. 343
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