Imagen de Cindy Barth en Pixabay
Aceptar sin juzgar. Para ello puedes practicar estos ejercicios:
Mindfulness de la respiración
"Descansa tu atención en los movimientos de tu abdomen al inhalar y exhalar. Descansa tu atención en el roce del aire cuando entra y cuando sale de tu cuerpo. Se recomienda utilizar metáforas, considerando a la mente como un cielo azul sereno y a los pensamientos como pájaros o nubes grises que van pasando."
Atención en la respiración con ayuda de números
"Primera fase 1: contar exhalaciones del 1 al 10. Segunda fase: contar inhalaciones del 1 al 10. Tercera fase: ser consciente del punto donde entra al aire y sale el aire de la respiración. Cuarta fase: contemplar la respiración únicamente."
Escaneo corporal
"Recorrer en silencio y amablemente con nuestra atención a cada parte de nuestro cuerpo; Comenzar desde lo más alto de la cabeza y terminar hasta los dedos de los pies, sin reaccionar a las sensaciones y sin juzgar al cuerpo. Hacer tantos recorridos como sea posible (como la “luz de una fotocopiadora”)"
Meditación del lago
"Imaginar un lago limpio, tranquilo y agradable. Ser consciente de cómo es que el lago recibe con aceptación el sol, viento y lluvia. Intentar observar los contenidos mentales con la misma receptividad del lago, aceptándolos sin juzgar. Darnos cuenta de que, cuando la mente y el lago están tranquilos, hay claridad."
Imaginería guiada: Tormenta de arena
"Imaginar cómo se acerca una tormenta de arena en el desierto, cómo pasa y cómo se aleja hacia el horizonte. Establecer un paralelismo entre la tormenta de arena y los conflictos en la vida. Ser conscientes de que hay conflictos inevitables que llegan, pasan y se van."
Álvaro Posse
Psicólogo,educador y bloguero colombiano
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Referencias:
Texto tomado de: Santisteban Negroe, J. M. (2023). Cultivo de conciencia plena I. México: UTEL.